¿Por qué se nos pone la piel de gallina?

En alguna ocasión, todas las personas hemos experimentado esa sensación tan extraña de “la piel de gallina”, una reacción de la piel que se da principalmente con el frío o las emociones intensas y que muchas veces no se sabe a qué se debe o qué función tiene.

La respuesta a por qué se nos pone la piel de gallina en determinadas situaciones se encuentra en unos músculos erectores, conectados al sistema nervioso simpático, que se contraen al sentir ciertos estímulos, ya sean un cambio brusco de temperatura o diversas emociones, como el miedo o el amor.

¿Cuál es la explicación científica de la piel de gallina?

Se llama piloerección y se trata del fenómeno de contracción involuntaria de los músculos erectores del pelo que, al contraerse, hace que el vello se erice y la piel cambie su textura, adoptando ese aspecto rugoso tan característico. 

En realidad, no cumple ninguna función fisiológica en los seres humanos, sino que es algo más primitivo, de cuando teníamos el cuerpo recubierto de pelo.

Para entender qué es lo que ocurre en nuestro cuerpo cuando se nos ponen “los pelos de punta” se tienen que entender unas cuestiones anatómicas:

– Cada uno de los vellos que recubren nuestro cuerpo se originan en un bulbo piloso subcutáneo, es decir, situado debajo de nuestra piel. 

– Alrededor de los bulbos pilosos se encuentran una serie de músculos lisos que van en paralelo al pelo y están conectados al sistema nervioso simpático por fibras diminutas.

Los responsables del erizamiento del vello son estos músculos lisos, que al contraerse cambian de dirección y se sitúan de manera oblicua en la piel, impulsando de esta manera el pelo hacia el lado opuesto y cambiando la textura de la piel.

Pero, ¿por qué se eriza la piel?

Antes hablábamos del cambio de temperatura y de las reacciones a las emociones intensas, pero, ¿qué sentido tiene?

No tiene ningún sentido, se trata de un vestigio ancestral. Pero es curioso saber por qué se produce:

Uno de los motivos por los que aparece esta reacción involuntaria es cuando se da un cambio brusco de temperatura en nuestro cuerpo, normalmente al pasar del calor al frío. Esto se debe a que, al contraerse los músculos lisos que mencionábamos anteriormente, se crea una capa de aire alrededor del cuerpo que nos protege del frío.

El problema es que los seres humanos no tenemos suficiente pelo en el cuerpo para que se pueda cumplir esta función, por lo que actualmente solo sería un vestigio de lo que fue en otra época, cuando sí estábamos recubiertos de pelo.

No obstante, otra de las causas es la que está relacionada con las emociones, ya sean agradables, como el amor, o desagradables, como el miedo.

Esta reacción nos muestra nuestra parte más animal. De hecho, muchos animales siguen compartiendo este rasgo por los mismos motivos.

Si tienes mascota, ya sea perro o gato, te habrás dado cuenta de que también a ellos les sucede, normalmente, cuando se encuentran en situaciones amenazantes.

Y es que la función principal de la piloerección es la de intimidar al adversario. El gato, por ejemplo, al erizarse parece más grande y agresivo.

Hoy en día, en el caso de los seres humanos, no resultaría un método de defensa, más bien al contrario, alertando al adversario de que estamos experimentando algún tipo de emoción extrema.

De esta manera, la piel de gallina se produce por la liberación de adrenalina, que se segrega en situaciones de frío o estrés, ya sea al experimentar emociones agradables o desagradables.

Así, las principales razones por las cuales se nos eriza el vello, se nos pone la piel de gallina o los pelos de punta son:

1.     Nervios

2.     Sustos

3.     Miedo

4.     Tristeza

5.     Empatía

6.     Excitación sexual

7.     Placer

8.     Cambio de temperatura

¿Recuerdas cuándo fue la última vez que se te puso la piel de gallina?